Todo comienza así… Después de haber sufrido la pérdida
de Kiara o como le llamábamos de cariño (La gordi). Ella era una hermosa rot wailer que nunca salía de
la casa.
En algunas
ocasiones, que logró salir, tuvo mucha suerte en poder regresar, pues al andar
perdida por la colonia, se encontró con Drinki un perro que tenía mi prima, que
más que de ella era de la calle, al que también llamaban “El rey del barrio”
pues era conocido por toda la gente y gracias
a el Kiara regreso más de tres
veces.
La última vez no tuvo la misma suerte pues se salió de
la casa y nadie se dio cuenta, pero lo malo de esto fue que Drinki había entregado el equipo ya hace unos
cuantos meses,y no habría nadie que la guiara de regreso a casa.
La buscamos por varios días pero no tuvimos éxito, solo
deseábamos que quien la encontrara, la tratara bien y la quisiera mucho. Después
de algunos meses fue una tarde cuando mi papá llego a casa, informándonos que
otra vez tendríamos mascota. Se trataba de un cachorrito blanco, tan blanco que
al momento de buscarle un nombre mi papá no lo pensó ni un segundo y lo llamo “Palomo”.
El primer día
que durmió en casa, se quedo en la sala y lloro toda la noche pero ignore su
llanto y preferí seguir en manos de Morfeo. Así pasaron unos días, hasta que
otra noche al escuchar sus aullidos me decidí a levantarme y fui por él para dormirlo
conmigo.
Un día se le escapo a mi hermano y yo estaba
preocupado de que le sucediera lo que a Kiara,
pero, me equivoque pues dos horas
después estaba en la puerta esperando a que alguien saliera por él.
Es un perro muy aventurero y es igual o más
conocido que Drinki: Hace un tiempo el ahijado de mis papas, llevo
unas fotos del festival de la primaria, donde aparece Palomo y nos
contaba que ese día fue la sensación pues en cada bailable hizo de las suyas,
haciendo reír al público hasta que lo sacarón de la escuela lo cual no fue fácil
pues es un perro muy ágil y nadie lo podía atrapar.
Ayer lleve una llanta a arreglar y Palomo me
acompaño. Al ver que un carro lo iba a atropellar grite su nombre, lo más curioso de eso fue que el conductor
del auto era un conocido y al verme dijo:
- ¿Conoces a
Palomo? Le conteste que sí, a lo que respondió –No inventes yo lo veo seguido
por mi casa, que está a dos colonias de aquí, tiene muchas historias y a hecho muchas travesuras.
-¡No me digas que es tuyo!
Y yo dije:- No , es de por mi casa .¿Porque?
-Ah! es que andan buscando a su dueño para que pague una de sus travesuras. Y me quede pensando mmm... si ese perro hablara que historias no me contaria.